Oh si, los buenos chicos no tienen nada que hacer con nosotras, y lo saben.
Antes eran los malos, los de la chupa de cuero y el pelo engominado los que nos volvian locas, nos encantaba que jugaran con nosotras y estabamos deseando que nos partieran el corazon al intentar "cambiarlos" (doloroso si, pero tan intenso...), aunque, como dice el anuncio"las mujeres se aburren rapido" y los tipos duros ya no son lo que eran, nosotras ya no nos encadalizamos por cualquier cosa y parece que necesitamos una vuelta mas de rosca en eso del sufrimiento.
Y ahi es donde entran ellos, la nueva "Generacion X": no son los mas listos, no son un buen partido, no son los mas guapos y puede que para muchas no sean ni atractivos, pero desde luego enganchan. Ese aura de eterno atormentado, de pecador incontenible y de corazon tierno dentro de miles de capas de infierno y condenacion...
Que sensacion de angustia y complejo de doña Ines, ¿verdad? Pero es que son tan complejos, tan intelectuales, tan diferentes, tan... atormentados y oscuros...
No os engañeis, son oscuros y no van a dejar de serlo; son como veneno que parece inocuo y se infiltra en lo mas profundo de las venas aturdiendonos y haciendonos perder el sentido comun... pero, como decia Mary Poppins: "con un poco de azucar..."
Otro dia mas
lunes, 29 de marzo de 2010
Como nos gusta el torturado de negro...
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