Oda a la imperfeccion

Me levante en medio de una tormenta de sabanas y piel; los tacones bajo la cama, una horquilla en la copa, un concierto de rimel corrido y ropa interior...

Por mas que busque no logre encontrar mi pintalabios...quiza se convirtio en un improvisado souvenir de media noche...que mas da.

Me puse las gafas de sol antes de salir de puntillas y me recibio una gelida rafaga de viento que alboroto aun mas mi, ya de por si, estropajoso pelo.

Al torcer la esquina la insistente migraña que me perseguia se apodero por completo de mi cabeza, ¡Dios, necesitaba un cafe!, pero todo lo que pude encontrar fue un muy elegante quiosco.

¿Los titulares? Un poema...

Chicas preciosas de la mañana a la noche...novios elegantes y cariñosos: modelos, deportistas, actores...una familia encantadora que no sabe que hacer con tanto dinero...trabajos maravillosos, creativos y entretenidos...nada de horarios...nada de ¿donde estoy? ¿quien eres?...

Eso no es una vida...¡es una pelicula!

Y he de decir que de lo mas aburrida...¿Que es la vida sin un poco de riesgo y diversion? Sin desbarajuste emocional, sin problemas hormonales, sin helado y clinex, sin nevera a medianoche, sin ampollas en los pies, sin peleas de gatas y desayunos en hoteles, sin tardes de chicas, sin spa y peluqueria para tres, sin desayuno con diamantes...

Cariño, no desees una vida perfecta...la podrias conseguir...

Yo me levanto con el pelo revuelto, suelo llegar tarde, se me olvidan las fechas importantes, se me rompen los tacones, me han desteñido los principes azules, llevo moño y gafas para estar en casa, me enfado, rio y lloro bastante a menudo y...¡que coño!

¡Me siento orgullosa de ello!

(Sobra decir que todo se soluciono con el cafe y un par de analgesicos leyendo un periodico de economia...al menos son realistas...)

Otro dia mas.